martes, 2 de julio de 2013

El ayuntamiento incumple sus propias ordenanzas municipales

El PSOE exige al alcalde que dispense a los comerciantes locales el mismo trato que a los de fuera 
El equipo de gobierno del PP apoyó hace meses, con los votos en contra del PSOE, una ordenanza municipal por la que obliga a los hosteleros del casco histórico a cambiar su mobiliario para que todas sus mesas y sillas pasen a ser blancas y las sombrillas o parasoles azules y, además, sin ningún tipo de publicidad.
Sin embargo, en el transcurso de esta semana el ayuntamiento ha permitido a la empresa San Miguel la instalación de todo tipo de mobiliario con publicidad y con colores distintos “a los que ellos exigen a los demás”, lamenta la edil socialista, Cristina Rodríguez.
La responsable socialista, además, recuerda que en la ordenanza aprobado por el gobierno de García Urbano se exige a los hosteleros que  “tanto los parasoles (sombrillas) como los toldos habrán de ser de color azul. Los parasoles no podrán contener publicidad alguna. Queda prohibida la impresión o utilización de muestras, publicidad o anuncios en estas zonas ya sea en vallas, escaparates, mesas, barriles/toneles, sillas o cualquier otro elemento que forma parte de la instalación”, recoge la ordenanza.
“Ni las mesas ni las sillas de las terrazas podrán incluir publicidad de ningún tipo. Las mesas y sillas habrán de estar de acuerdo con el entorno, en color blanco”.
Además se añade que “queda prohibida expresamente la publicidad o exhibición del nombre comercial de cualquier establecimiento en banderolas que vuelen sobre la vía pública en todo el ámbito del casco antiguo y calle Real”.
El incumplimiento de estos aspectos se consideran como faltas graves y esto supone “multas de setecientos cincuenta y un euros (751 euros) a mil quinientos euros (1.500 euros)”.
Además de esta sanción económica el “tener mesas, sillas o sombrillas de otros colores a lo establecido por el gobierno local del PP”, según Rodríguez, supondrá “la suspensión temporal de las licencias por un periodo de hasta dos años, la suspensión temporal de las actividades y clausura temporal de los establecimientos por hasta dos años y la imposibilidad de realizar la misma actividad en que se cometió la infracción hasta por un año”.
“A nosotros nos parece muy bien la organización de este tipo de actividades. Lo que estamos criticando no es su celebración, que nos parece perfecta, sino el hecho de que el alcalde permita a las empresas de fuera lo que no es capaz de dar a las del municipio. Se da la paradoja de que a una empresa de fuera se le permite de todo y a los que están todo el año trabajando por la ciudad no se le para de poner zancadillas y problemas”, asegura Rodríguez.
Ordenanza municipal reguladora de la publicidad, venta y consumo de alcohol y tabaco
Por si no fuese suficiente la edil socialista lamenta que el propio ayuntamiento esté incumpliendo la Ordenanza municipal reguladora de la publicidad, venta y consumo de alcohol y tabaco con la que cuenta el consistorio desde el año 2005.
Rodríguez recuerda que “entre las medidas preventivas contempladas en la Ordenanza se prevé la promoción e impulso de campañas informativas que conciencien sobre los efectos del consumo abusivo de alcohol y tabaco, a fin de modificar hábitos y actitudes en relación con éste”.
“La Administración municipal no utilizará como soportes informativos o publicitarios objetos relacionados con el consumo de bebidas alcohólicas o tabaco y evitará la promoción de estos productos en la organización de actos municipales u organizados en dependencias municipales”, lamenta la edil.
Por todo ello la concejala solicitó al alcalde que opte por derogar la ordenanza o por acatarla y cumplirla ya que “no es de recibo que el ayuntamiento esté sancionando mes a mes a decenas de establecimientos y personas por el incumplimiento de este texto normativo y luego el ayuntamiento lo esté incumpliendo sistemáticamente. Hay que dar ejemplo”.