martes, 7 de febrero de 2012

El PP desoye la reivindicación ciudadana para que la Herencia Nadal se invierta en Estepona

El PSOE presentó en el pleno de la Diputación una moción respaldando a los colectivos del municipio



El Grupo Popular ha rechazado hoy en el pleno de la Diputación una moción del Grupo Socialista en la Diputación de Málaga en la que instaba de que de manera inmediata el Obispado de Málaga reintegre a la parroquia de Los Remedios, de Estepona, el dinero de la herencia Nadal, para que se pueda invertir en la localidad, preferentemente en un proyecto universitario público, cumpliendo la voluntad de la testadora. “Es importante para Estepona que la herencia se invierta allí, es sinónimo de creación de puestos de trabajo”, ha recalcado el portavoz socialista en la Diputación, Francisco Conejo, para quien la negativa del PP "los deja retratados ante el pueblo de Estepona". "Planteamos que el Obispado tiene que interpretar el testamento como hacen los ciudadanos de Estepona. El beneficiario es el pueblo de Estepona", ha explicado Conejo. "El PP apoya al Obispado y prefiere que se invierta en un proyecto privado y no en una universidad pública; esa es la única interpretación posible", ha resumido Conejo.

En la moción, los socialistas pedían que la Diputación emprendiera todas las actuaciones posibles para preservar el legado y la herencia que le corresponde al pueblo de Estepona. En este sentido, “apoyamos la propuesta de creación de una Fundación, o cualquier otra entidad, como piden los miembros del Consejo Pastoral de la Parroquia Los Remedios, que desde Estepona, tome las decisiones acerca del legado de la Herencia Nadal que le corresponde a la parroquia”.

El portavoz ha recordado que la moción ha respondido a que diversos colectivos del municipio de Estepona reclaman al Obispado de Málaga que devuelva a la cuenta de la parroquia el dinero transferido al Fondo Diocesano de Ayuda, respetando la voluntad de María Catalina Nadal. “La plataforma de vecinos y el propio Consejo Parroquial han solicitado información sobre el dinero al Obispado, al cual consideran albacea de la herencia y no el titular de ésta”, ha explicado Conejo. Los vecinos reclaman que sea el municipio de Estepona el beneficiario final de las inversiones o proyectos financiados con la parte correspondiente de la herencia Nadal, que después de casi cuarenta años se calcula en casi 20 millones de euros.

Antecedentes
El 5 de septiembre de 1973, María Catalina Nadal, propietaria de tres millones de metros cuadrados de tierras en Estepona y diversos bienes en Onteniente (Valencia) hace su testamento. En su última voluntad, distribuye los terrenos de Estepona en dos partes, a las que hay que sumar otra tercera, que nace de la sustitución a que somete su tía Antonia Guerrero Díaz varias parcelas. De este modo, los tres millones de metros cuadrados en Estepona quedan repartidos entre tres partes:

• La Fundación Antonia Guerrero con 503.764 m2.
• La Fundación Nadal, con 566.351 m2.
• La otra 3ª parte para 6 legatarios, entre los que se encuentra la Parroquia de Santa María de los Remedios de Estepona con un 30% (los otros 5 son el Seminario de Onteniente, Caritas, la iglesia Santa María de Onteniente…).

Esto se traduce en que de los 1.332.704 m2 que son de esta 3ª parte, a la parroquia de Los Remedios de Estepona le corresponden 402.612 m2.

Los beneficiarios de estas tres particiones son:

• Los de la Fundación Antonia Guerrero, según su propio testamento: “(…) para lo cual establece una Fundación en Estepona para costear los estudios de las mujeres pobres de dicho pueblo, dando preferencia a las carreras de Leyes y Filosofía y Letras.”

• Los de la Fundación Nadal según la cláusula 3ª del testamento de Mª Catalina Nadal son: “TERCERA: ordena la testadora que el importe de todos los bienes que le corresponden de la herencia de su hermano (…) se empleen en una fundación Religiosa-Benéfico y Docente (…) que se denominará FUNDACION JOSÉ NADAL (…) que los beneficios de la mencionada fundación se apliquen fundamentalmente a obras de tipo cultural, social y religioso de la Parroquia de Los Remedios de Estepona, y si se trata de ayudar a personas físicas, que tengan derecho preferente a los beneficios aquellas personas que residan en Estepona”.

• Los beneficiarios de la parte de los 6 legatarios, cada uno a quien corresponda y concretamente el 30% de ésta (402.612 m2), se destinan a lo que textualmente dice la cláusula 4ª del testamento de Mª Catalina: “Para obras de Nuestra Sra. de los Remedios de Estepona (apostólicas, culturales, materiales, etc.) un treinta por cien”.

Como es obvio por voluntad expuesta en el testamento de María Catalina Nadal, está claro que los beneficiarios del legado de la Parroquia Los Remedios y de la Fundación Nadal, son los feligreses de esta Parroquia o en su caso los residentes en Estepona. Ni el Obispado de Málaga ni ninguna otra localidad, porque sería ir contra la voluntad de la testadora.

Tras el fallecimiento del Padre Manuel en 1988, quien preservó todos los bienes, pasó a manos del obispo de Mallorca, Teodoro Úbeda Gramaje, como preveía el testamento. El 16 julio de 1990, el obispo crea la Fundación José Nadal, incluyendo en ella como patrono a la Universidad Pontificia de Salamanca. A su vez, firma un convenio urbanístico con el Ayuntamiento de Estepona y la Pontificia el 29 de mayo de 1992, para promover los terrenos y con el aprovechamiento urbanístico crear la primera universidad privada del sur de España.

El problema fue que, por mediación del secretario de finanzas de la Conferencia Episcopal Española, en ese año se deja la promoción urbanística en manos de una sociedad denominada Corporación de Promotores Europeos S.A.

Esta empresa consigue, con el aval de los terrenos, 1.500 millones de las antiguas pesetas en 1990, y salvo unos 300 que sirvieron para indemnizar colonos, 1.200 millones se perdieron en una quiebra que el 29 de septiembre de 1995 en el informe de calificación emitido por los síndicos de la Quiebra de Corporación de Promotores Europeos S.A., fue calificada de fraudulenta.

Sin embargo, antes de fallecer fue capaz de reunir a los bancos acreedores y salvar la mitad de los terrenos de la herencia (1.500.000 m2). Tras su muerte el 18 de mayo de 2003, el obispo de Málaga de entonces, Antonio Dorado Soto, se hace cargo de la herencia y vende entre 2004 y 2005 a Unicaja y Globalia, toda la herencia (1,5 millones de m2) que el obispo de Mallorca había salvado “in extremis”.

El obispo de Málaga, cumpliendo la voluntad del testamento, reparte a cada heredero o legatario su parte, según los plazos acordados. Estos pagos finalizan hace unos tres años. De este modo, la Fundación Nadal y la Parroquia de Los Remedios poseen a su nombre las cantidades provenientes de esa venta.

Se ingresaron todos los pagos en una cuenta específica a nombre de la Parroquia de Los Remedios. Del total del importe ingresado, el Obispado ha cobrado el canon parroquial (10%). Del 90% restante, unos 16,8 millones de euros, los miembros del Consejo Parroquial informan de que el Obispado, de forma unilateral, ha ido haciendo traspasos hacia el llamado Fondo Diocesano de Ayuda, quedando actualmente un importe en torno al 10% del total inicial en la cuenta de la Parroquia de Los Remedios.